viernes, julio 01, 2011

Semana...

Viernes de paranoia

Los detesto, veo con miedo transcurrir la semana. Con tristeza siento como los lunes apenas puedo despertarme y levantarme, luego de haber luchado contra tí los 3 días anteriores.

Es así que la semana inicia tapando hemorragias en mi corazón; con dolor cauterizo las heridas para que el martes muchas de ellas aún se nieguen a cerrar inflamadas por tus recuerdos e infectadas por tu añoranza.

Para el miécoles comienza a invadirme la paranoia; el fatídico viernes se acerca y con él la avalancha de dolor comienza a orquestarse.

Llega el jueves y quiero dormir en el sillón pues sé que esa noche invadirás mis sueños y bañarás con gasolina mis sábanas; sé también que aderezarás mi noche con un soundtrack que necesariamente incluirá añoranzas de mar y California...

Me vas a herir, no sé como será ésta vez; no sé si repetirás de nuevo tus humillaciones, tus promesas no cumplidas o si me harás el amor y prometerás de nuevo que nunca te vas a ir...

El resultado al final será el mismo, el viernes amaneceré nadando en azufre y las heridas de nuevo comenzarán a sangrar...

Pasaré el sábado añorando todo el día tu presencia; mi desayuno quedará excluido, porque cada espacio, cada movimiento, cada olor significa un homenaje a las heridas, al dolor, a los sueños no cumplidos... a nuestra historia.

El domingo me sentiré mejor, veré como poco a poco va disminuyendo la tortura y comienzas a juntar tus pertenencias para marcharte...

Te despediré en medio de abrazos, besos y caricia, pidiéndote por favor, no vulevas...

Y bien, lunes de nuevo abriré los ojos y de nuevo rogaré porque ésta vez si escuches mis plegarias....

Marzo 2011